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10 de Noviembre

BioArgentina 2014

Los desafíos de la biotecnología en el país y la región, ejes del debate en Bioargentina 2014.

Desde diferentes perspectivas, científicos y empresarios analizaron el futuro de la Argentina en áreas estratégicas de la biotecnología. Más de 900 profesionales participaron de las conferencias magistrales y los encuentros de vinculación.


Buenos Aires, noviembre 2014. Investigadores, empresas y potenciales inversores se encontraron en BioArgentina 2014, un evento organizado con el fin de promover la vinculación público-privada en biotecnología. Participaron más de 900 personas y se realizaron 200 entrevistas en donde científicos presentaron sus proyectos más innovadores a firmas nacionales. El encuentro fue organizado por la Cámara Argentina de Biotecnología (CAB).

En el inicio de la jornada el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, Lino Barañao afirmó que “BioArgentina es un hito que contribuye al desarrollo de la biotecnología. Hoy estamos ante un nuevo modelo productivo con empresas de base tecnológica, en donde el valor está en la idea, en la creatividad”.

Hugo Sigman, presidente de la Cámara Argentina de Biotecnología (CAB), subrayó que “lo más significativo de BioArgentina es la vinculación. Se inscribieron 200 centros de investigación públicos interesados en reunirse con empresas y desarrollar proyectos capaces de sustituir importaciones y generar exportaciones con valor agregado”.

Durante las conferencias magistrales, se presentaron la doctora Cristina Garmendia, ex ministra de Ciencia e Innovación de España y el doctor William Burnquist, director de Mejoramiento Genético del Centro de Tecnología Canavieira (CTC) de Brasil. Además, el doctor Craig Venter, pionero en la secuenciación del genoma humano, brindó una videoconferencia desde San Diego, Estados Unidos.

La doctora Garmendia habló sobre la importancia de la apertura del diálogo entre los diferentes sectores público y privado para llevar a cabo las reformas científico-tecnológicas que España necesitaba para desarrollar la industria biotecnológica.

“Tenemos que pensar una nueva manera de trabajar que incluya la cooperación entendiendo que para ser competitivos debemos ser innovadores. Hoy más que nunca la innovación debe ser abierta y dinámica para afrontar grandes retos como el cambio climático, el abastecimiento de agua potable, la seguridad alimentaria y la salud”, sostuvo la doctora Garmendia.

Por su parte, el doctor William Burnquist, quien estableció el programa de transformación genética de la caña de azúcar en el CTC de Brasil, se refirió a los avances de la biotecnología vegetal. “Entre las ventajas de la agrobiotecnología se incluyen una mayor productividad y calidad de los productos, menores costos de producción, y menor impacto ambiental. Hoy en día, 18 millones de agricultores en 27 países se benefician con estas tecnologías”.
Por último, el doctor Craig Venter, considerado uno de los principales y más influyentes científicos del siglo XXI, destacó que “con la secuenciación del genoma, generamos un nuevo lenguaje que a largo plazo nos va a permitir generar órganos para trasplantes, nuevas vacunas, como por ejemplo, la primera vacuna basada en ADN del mundo. Hay que apostar a los científicos jóvenes para que rompan el molde con los pensamientos del pasado y utilicen la imaginación para buscar beneficios para toda la humanidad”.

Vinculación entre investigadores y empresas de biotecnología

Por otro lado, la doctora Graciela Ciccia, directora de Innovación y Desarrollo Tecnológico de Grupo Insud, inauguró las sesiones de la tarde en donde se desarrollaron 200 reuniones de vinculación entre investigadores y empresas de biotecnología. “Las jornadas fueron un verdadero éxito y sirvieron como puntapié inicial para que los investigadores pudieran presentar sus capacidades científicas, proyectos de I+D y startups a potenciales socios estratégicos en un ambiente distendido”, comentó Graciela Ciccia.


Acerca de la Cámara Argentina de Biotecnología

La CAB se fundó con el objetivo de contribuir a una política público-privada en biotecnología, a partir de una mirada global que integra desde la investigación y el desarrollo, hasta la producción, comercialización y exportación de productos biotecnológicos.

Una de las principales estrategias de la CAB es la cooperación con organismos e instituciones nacionales e internacionales que apoyen proactivamente el desarrollo y fortalecimiento de la biotecnología como el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), el Ministerio de Ciencia Tecnología e Innovación Productiva; el Ministerio de Industria, el Ministerio de Salud y el Ministerio de Relaciones Exteriores, así como la asociación con cámaras y entidades extranjeras.

El aporte de la CAB en este contexto tan dinámico es contribuir a la coordinación de un trabajo conjunto valioso, entre actores de diversos sectores, con el objetivo de fortalecer el liderazgo del país en diversos sectores como: industria farmacéutica, alimenticia, sanidad animal y vegetal, diagnóstico, industria agropecuaria, forestal y biocombustibles.

Las empresas socias de la entidad son: Aceitera General Deheza, Amega Biotech, Arcor, Beta, Bioceres, Biogénesis Bagó, BioProfarma, BioSidus, Chemo, Don Mario Semillas, Elea, Gador, Garruchos, Indear, Molinos Río de la Plata, Ledesma, pharmADN, Rizobacter, Vicentín y Wiener Labs.


Más información:

http://www.cabiotec.com.ar/

@CABiotecnologia
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