El director general de Biogénesis Bagó, Guillermo Mattioli participó del 28 ° Foro Mundial de la Asociación Internacional de Administración de Alimentos y Negocios- IFAMA, panel “Food & Health”- que se realizó en Buenos Aires del 23 al 27 de junio.
Mattioli compartió el trabajo que desde las ciencias veterinarias se está desarrollando para garantizar la seguridad alimentaria en el mundo, principal eje del encuentro que reunió a conferencistas internacionales de empresas, el sector público y la academia.
“La buena noticia es que hay biotecnologías disponibles y accesibles para incrementar la producción de agroalimentos que deberá crecer un 100 % para el 2050”, sostuvo Mattioli. Sin embargo remarcó que el gran desafío es lograr que esos adelantos lleguen realmente a manos de los productores, sobre todo a los pequeños y medianos. “En Mercosur existen 5,8 millones de explotaciones agropecuarias, de las cuales el 85% son familiares. Tenemos el desafío de lograr que este sector adopte las tecnologías disponibles muy simples pero muy eficientes, para prevenir las enfermedades que afectan a los animales de producción “.
Precisó que en el Mercosur hay 100 millones de vacas de cría y 60 millones de terneros destetados por año. “40 Millones de vacas son ´turistas’, no producen un ternero e igualmente impactan en el ambiente, con el uso del suelo y el consumo de agua”.
“Muchos productores no aprovechan las innovaciones. En la región-agregó- solo el 30 % de los establecimientos tienen asesoramiento veterinario permanente e invierten, en promedio, menos de 5 dólares en sanidad por cabeza, mientras que en los países altamente tecnificados y que lograron llegar a la frontera de producción, la inversión es de más de 20 dólares”. Mattioli subrayó que “las soluciones existen, el gran desafío es ampliar la adopción de tecnología, mejorar la comunicación y la llegada a los productores. Cada 10 puntos de mejora de destete logramos 10 millones más de terneros”.
Por otra parte, remarcó que desde el trabajo conjunto que realizan científicos, laboratorios, veterinarios y productores que adoptan tecnología, se puede realizar un importante aporte al sostenimiento del concepto “Una salud”, para prevenir enfermedades que surgen en la interacción entre seres humanos, animales y el ambiente.
En ese sentido, sostuvo que con las biotecnologías hoy disponibles es posible realizar un aporte muy eficiente para garantizar la inocuidad y calidad de los alimentos, controlar la incidencia de las zoonosis y luchar contra la resistencia a los antibióticos, poniendo el foco en la prevención y en el uso de vacunas, fundamentales para lograr sanidad ante escenarios de intensificación de la producción.
