Page 1 Page 2 Page 3 Page 4 Page 5 Page 6 Page 7 Page 8 Page 9 Page 10 Page 11 Page 12 Page 13 Page 14 Page 15 Page 16 Page 17 Page 18 Page 19 Page 20 Page 21 Page 22 Page 23 Page 24 Page 25 Page 26 Page 27 Page 28 Page 29 Page 30 Page 31 Page 32 Page 33 Page 34 Page 35 Page 36 Page 37 Page 38 Page 39 Page 40 Page 41 Page 42 Page 43 Page 44 Page 45 Page 46 Page 47 Page 48 Page 49 Page 5034 - Buenas prácticas - EL MOLINO determinado umbral, alcanza para confirmar que las vacas están en es- trés sin necesidad de buscar signos en ellas. Es importante saber que las vacas más grandes y/o más produc- toras alcanzan el umbral de estrés a un ITH menor (68) que vacas más pe- queñas y/o menos productoras (72). CAMBIOS EN EL METABOLISMO Los cambios que suceden en el or- ganismo de las vacas lecheras con estrés calórico son similares ante cualquier factor de estrés, aunque no siempre en igualdad de magnitud. Básicamente, se pueden listar así: • Disminución de consumo de alimentos. • Disminución de la actividad de rumia. • Reducción de la producción de leche. • Reducción de los índices de detección de celos. • Menor fertilidad en los celos. • Más mortandad embrionaria. • Aumento de las células somáticas. • Reducción de la inmunidad. Bienestar animal: estrategias en nutrición, suministro de agua y adecuación de las instalaciones El agua es sumamente importante, aunque no siempre es un tema de- bidamente atendido. El agua debe ser suficiente en cantidad, buena en calidad (principalmente higiénica) y fresca. Una vaca Holstein de alta producción necesita beber entre 120 y 150 litros de agua por día en vera- no, y lo hará si esta cumple con los tres requisitos antes mencionados. Un buen lugar para ofrecer agua fresca a las vacas es a la salida del ordeño. Es recomendable, por un lado, porque es un momento en que sienten sed y eso aumenta el con- sumo; por otro lado, el pasaje lento (embretada por embretada) y de to- das las vacas por el lugar da tiempo a que, sin competir, todas tengan ac- ceso al bebedero. Además, esto ayuda a tener a mano el bebedero para su control frecuente de funcionamiento y limpieza. Bebederos no tan grandes con muy buen flujo de agua fresca fa- cilitan la higiene. Si bien en dos ordeños diarios las va- cas que beben bien a la salida del or- deño pueden consumir el 60% o más del agua que requieren diariamente, el 40% restante determinará la pro- ducción de leche basándose en la can- tidad, la frescura y la calidad del agua. DISTANCIAS Y SOMBRA Siempre debe recordarse que, en los días de más calor, las vacas que dejan una parcela de pastoreo para acer- carse a un bebedero regresarán a co- mer pasto si la distancia que deben recorrer es corta. Con más de 150 o 200 metros, las vacas se quedarán en los alrededores de los bebederos y re- ducirán mucho el consumo de pasto. Las sombras en las parcelas de pas- toreo son absolutamente necesarias para reducir las consecuencias del estrés calórico, y si no existen debe intensificarse la eficacia en el refres- cado de las vacas en las instalaciones de ordeño (calidad y frecuencia). También es importante tener en cuenta el trayecto que deben ca- minar las vacas hacia y desde las “Aunque el estrés calórico por sí solo no es motivo suficiente para el ingreso de microorganismos patógenos a las glándulas mamarias, un au- mento de los procesos inflamatorios y una mayor gravedad de las mas- titis subclínicas preexistentes se reflejan en los aumentos de las células somáticas en leche de tanque”. Mario Sirvén